Es otro factor que influye mucho a la hora de utilizar un protector solar con mayor o menor protección. Con un SPF 50, podrás disfrutar de más horas de sol sin tener que volver a echarte la crema. Y, no, no te preocupes, ¡puedes seguir poniéndote morena con con protector solar de 50! 

Hay que tener en cuenta que la exposición al sol es diferente en las diferentes ciudades de España. El valor recomendado para adultos es al menos de SPF 30, sin embargo para niños hay que utilizar el de mayor protección solar SPF 50+. 

Cuidado con los falsos mitos que se leen por ahí ¡No actúa inmediatamente! Es necesario aplicar mínimo 20 minutos antes de tomar el sol por cada parte del cuerpo, piernas, brazos, espalda, torso, rostro, este último es la parte más sensible, por lo que no hay que olvidarse de esta parte del cuerpo.  Y ahora la pregunta del millón, ¿cada cuánto tiempo? Repetir el proceso después de bañarse, a no ser que sea resistente al agua. En condiciones normales, cada 2 o 3 horas será necesario volver a ponerse crema. Y, ¿si estás a la sombra? También, ¿los días nublados? Cuidado con esos días, los rayos ultravioletas se siguen filtrando y llegando a nuestra piel, por lo que es muy probable que si no nos ponemos protección solar, nos quememos la piel.